El legado de Roger Dubuis
Excelencia interna
La Manufactura Roger Dubuis se inauguró en 2002. Más que crear un hogar para la relojería expresiva, la producción integrada permitió a la Maison dominar y reinterpretar las complicaciones, al tiempo que controlaba sus propios estándares de calidad. Esto se demostró al instante al año siguiente, cuando Roger Dubuis presentó su primer órgano regulador interno: el volante de inercia. Rápidamente se convirtió en fundamental para la artesanía de la Maison cuando se utilizó para el primer tourbillon interno.

El tourbillon en todas sus formas
Muy pocos relojeros son capaces de producir un tourbillon en sus instalaciones, ni de enfrentarse al reto de reinterpretar su intrincada construcción. Roger Dubuis, sin embargo, lleva más de 20 años reinventando la complicación, lo que ha dado lugar a la creación de relojes expresivos y diseños característicos.

Hitos
Tourbillon
Los tourbillons de Roger Dubuis nunca se colocan a las 6 en punto.
Una marca emblemática de la producción interna de la Maison.
Con un sonido distintivo debido a su alto par.
La gran jaula del tourbillon de la Maison ofrece un mejor equilibrio, al tiempo que aumenta el potencial energético para otras funciones.
La jaula superior se produce con el acabado pulido espejo característico de la Maison.
Un toque sofisticado que realza aún más la estética.




Materiales ingeniosos
Mientras que la jaula inferior del tourbillon de Roger Dubuis está hecha de titanio no magnético, casi dos veces más ligero que el acero inoxidable, la jaula superior del tourbillon está fabricada en cromo cobalto no magnético. Esto reduce el peso de la pieza en un 16 %, al tiempo que ayuda a optimizar la reserva de marcha a 72 horas.